El regreso a clases no es solo una fecha en el calendario, es una oportunidad para que los niños comiencen una nueva etapa llenos de energía, confianza y bienestar. Preparar mochilas, uniformes y útiles es importante, pero hay algo que puede marcar la diferencia en su rendimiento académico y emocional: cuidar su salud integral antes de volver a las aulas.
Invertir en su bienestar ahora no solo previene problemas a futuro, sino que les da las herramientas para aprovechar al máximo cada día en la escuela.
Un año escolar exitoso empieza con un cuerpo sano.
Estos son los chequeos recomendados antes de iniciar clases:
Examen médico general: asegura que estén en óptimas condiciones para aprender, jugar y socializar.
Examen visual: la visión clara mejora la concentración, comprensión lectora y confianza.
Chequeo dental: mantiene su sonrisa sana y evita ausencias escolares.
Tip extra: incluye hábitos como desayunar antes de salir, dormir las horas necesarias y mantenerse hidratados.
El éxito escolar no solo depende del cuerpo, sino también de la mente y las emociones.
Establecer rutinas de sueño y estudio reduce el estrés.
Promover conversaciones abiertas sobre cómo se sienten en la escuela.
Practicar actividades que refuercen la autoestima y la confianza.
Tip extra: Dedicar unos minutos al día a leer juntos o hacer actividades en familia fortalece el vínculo y motiva su desarrollo integral.
